GPS y uso profesional en transporte de autobuses y camiones

Hoy me han pedido desde un medio impreso mi opinión sobre el uso de los GPS por parte de profesionales del transporte como son los conductores de autobuses y de camiones.

He tomado algunas notas que he compartido con el periodista y por qué no, también con quien quiera leerlo aquí.

En estos momentos tengo dos smartphones y dos tablets (Android e iOS) y todos ellos llevan un chip GPS integrado dentro de ellos, lo que les permite utilizar funciones de geolocalización. Además llevo años utilizando pulsómetros Polar con GPS para mis actividades deportivas (ciclismo, running, …). Mis ültimos gadgets tecnológicos eran un Nike+ SportWatch y recientemente he sustituido mi veterano Pola

"El GPS, un guía que no ve"
«El GPS, un guía que no ve» artículo publicado en Deia el 28 de Julio 2015 pág.17 por Aner Gondra.

r RS800CX por un flamante Polar M400 con funciones de cuantificador personal diario aparte de llevar integrado el GPS y comunicarse por Bluetooth con el SmartWatch y actuar como SmartWatch.

Tengo compañeros que convierten la actividad deportiva de andar en bici en algo más que un deporte, sino en un estilo de vida, tendríais que ver a Julen Iturbe (rodando suave-suave) gestionando y programando sus rutas y metiéndolas en su GPS. Probablemente invierta más tiempo en preparar, estudiar, cargar y compartir sus rutas que el tiempo que tarda en realizar sus viajes.

Pero hoy toca ver la utilidad de los GPS en un uso por parte de un profesional de la carretera a raíz del accidente de un autobús en Francia que se metió en un túnel en el que no cabía según dicen las fuentes iniciales por «hacer caso al GPS» y seguir sus indicaciones. Afortunadamente no ha habido pérdidas irreparables. Las señales del gálibo no estaban completas por lo que dice el embajador, pero a la entrada del túnel se ve claramente una señal que indica la altura máxima y que el conductor no vió o no hizo caso.

Hay GPS profesionales por supuesto, pero no por instalarlos sin más, funcionan. Requieren de una formación en su uso y de un entrenamiento previo como cualquier otra herramienta de trabajo profesional.

Los sistemas GPS sólo sirven si están permanentemente actualizados y disponen de información en tiempo real de las incidencias de tráfico y situación de las carreteras.

La comunicación del GPS no se realiza con los dispositivos tradicionales a la venta al público. El sistema debe a su vez de emitir la posición en tiempo real del vehículo de manera que los gestores de la flota puedan tomar decisiones desde la central. Por lo tanto se debe comunicar por GPRS/3G/4G/Satélite con la base.

El uso de sistemas auxiliares de conducción debe de ser incluido en la formación del conductor como profesional. Debe de ser entrenado en su uso óptimo y adecuado a sus propias necesidades con conocimiento de su propio uso y mantenimiento.

Toda ruta debe ser planificada con anterioridad al viaje y los sistemas de guiado por GPS y avisos deben ser un complemento, nunca el sistema principal. Cualquier cambio en la misma debe ser realizado sin perder la atención de la conducción lo que requiere una parada para realizarlo.

Los sistemas de guiado automático se están experimentando en coches sin conductor, pero los sistemas de ayuda ya se utilizan en la navegación marítima y aérea.

Las empresas de transporte de mercancías utilizan los sistemas GPS para calcular las rutas óptimas para sus camiones y pueden ser desviados de su ruta por la central para realizar una recogida o entrega antes o después de lo previsto o en función de los criterios que estimen convenientes. También existen sistemas que optimizan la carga, no sólo las rutas y recorridos.

Yo personalmente, siendo un profesional, además de los sistemas electrónicos incorporados y auxiliares de la conducción llevaría siempre a mano mapas de carreteras en formato papel por si acaso los sistemas electrónicos fallan.

Por muy bueno que sea el sistema y muy actualizado que esté, si estás utilizando una ruta y ésta está cortada y debes utilizar una alternativa, nunca sabes si ha habido una incidencia de última hora que hace que las condiciones hayan cambiado.

Para ello, sistemas «sociales» en los que los profesionales de la conducción puedan compartir las incidencias en un trayecto son vitales para los profesionales de la carretera. El mejor sistema es la propia radio del vehículo mediante la cual, pueden avisar a los que realizan la misma ruta de incidencias en la misma.

Sistemas como Waze (adquirido por Google e integrado en Google Maps sus incidencias de tráfico) en los que los propios conductores indican las incidencias según ocurren aplicados a un entorno profesional serían de gran utilidad. Además, esos sistemas deberían de alimentarse de los propios de las autoridades de tráfico, introduciéndose en ellas de manera automatizada las incidencias que reporten las patrullas a pie de carretera. Yo personalmente utilizo indistintamente tanto TomTom (versión para smartphone) cuando no dispongo de conectividad (los mapas se guardan localmente) como Waze (los mapas e incidencias se actualizan por la conexión 3G mientras vas conduciendo).

La propia TomTom por ejemplo, fabricante de los populares navegadores que utilizan los usuarios, tiene su propia gama profesional: http://business.tomtom.com/es_es/fleet-management/

Dentro de las propias especificaciones técnicas algunos productos incorporan sistemas de análisis de la conducción que miden parámetros como consumo, aceleración/frenadas bruscas, toma de curvas más o menos agresivamente, tiempos de conducción, alertas de atención/detección de cansancio/somnolencia. http://business.tomtom.com/es_es/fleet-management/improved-driver-behavior/#worksmart-traffic

Finalmente, todos estos sistemas siempre deben ser una ayuda a los profesionales y nunca una herramienta de presión por parte de las empresas (como la media dice que tienes que hacer tanto en ese tiempo, …).

En USA hay compañías de seguros en las que pagas el seguro del vehículo en función del número de kilómetros que hagas, durante cuánto tiempo, por cuáles carreteras, a qué horas y finalmente, en función de lo «buen conductor» que seas. Para ello instalan (voluntariamente) unas pequeñas cajas negras que monitorizan todo ello y periódicamente lo envían a la central y de acuerdo con unos parámetros acordados por la compañía de seguros y el asegurado, pagar más o menos. No es lo mismo conducir todos los días en una carretera de alta velocidad con gran cantidad de tráfico a horas punta que hacerlo a bajas velocidades por carreteras con poca siniestrabilidad y sin apenas tráfico. Cuanto mejor conductor seas mejor, cuanto menos riesgo, mejor.

Una cosa me preocupa en la propia publicidad de TomTom:

«La navegación ayuda a que los conductores se relajen:
WORKsmart™-Safety ayuda a los conductores a mantener la vista en la carretera y las manos en el volante. Los navegadores TomTom PRO incluyen funciones innovadoras como la indicación anticipada de carriles, para facilitar la conducción por cruces complicados; software de texto a voz, que reproduce mensajes e instrucciones de trabajo; y reconocimiento de voz para introducir direcciones fácilmente. De este modo, los conductores estarán expuestos a menos distracciones y niveles de estrés más bajos.*

Nunca, bajo ningún concepto debe de relajarse un conductor, disponer de ayudas y comodidades sí, pero relajarse de manera que la atención disminuya, NO. Si mi sistema de conducción me indica la velocidad máxima en el tramo de carretera por la que circulo, me acostumbraré a mirarlo en la pantalla del sistema y no en las propias señales. Si las autoridades han detectado algún cambio en las condiciones y por ello variados los límites y cambiado la señalización oportuna, es posible que no se haya actualizado el sistema. Deberé de permanecer siempre atento a la señalización ya que es lo que nos garantiza nuestra seguridad. Si yo estoy esperando a que el navegador me diga por qué carril tengo que ir y cuál es la salida por la que tengo que abandonar una carretera en lugar de haber estado atento a las señales, acabaré teniendo un problema.

Finalmente, no vale cualquier navegador, ni cualquier sistema, y siempre debe de estar actualizado aunque ello suponga un coste. No sirve eso de ir a no sé qué página y descargar no se qué fichero que contiene … No fíes tu futuro a soluciones no contrastadas.

El otro dïa en un recorrido de Lekeitio a Bilbao en autobús público, tras la salida, el sistema perdió la localización GPS (eso dijo el conductor) y desde entonces hasta Bilbao fuimos sin que ninguno de los pasajeros pudiera pagar mediante su Barik ni el conductor indicar al sistema en qué parada estaba. Aunque el conductor en una de las paradas intentó resetear el sistema y avisó a la central por teléfono de la incidencia, tuvo que realizar todo el recorrido con el sistema caído y por lo que comentaban era habitual. Evidentemente el sistema está mal diseñado y el hecho de que caiga uno de los servicios hace que el resto tampoco funcionen, o bien el sistema está bien diseñado y el profesional no ha sido entrenado suficientemente en su mantenimiento.